Con la presencia de Sabbatella se homenajeó a la mujer por su trascendente rol social. «Todas», también las adolescentes y niñas.

El martes 12 de marzo, AFSCA conmemoró a la Mujer en Cancillería. Así como “son muchas las que mueren por el sólo hecho de ser mujer”, otras han sido homenajeadas el martes por esa condición. La cita corresponde a la periodista Mariana Carabajal, quien junto a Elsa Drucaroff y Cynthia Ottaviano, expuso en un panel que se destacó por el nivel de reflexión. El eje del encuentro fue «La perspectiva de género en los medios de comunicación audiovisual», moderado por Ernesto Benítez.

Drucaroff, escritora de novelas y ensayos, inició las exposiciones analizando la cobertura que realizaron los principales diarios nacionales del Día Internacional de la Mujer. Prácticamente ninguno sacó el tema en tapa y exhibió lo magro del abordaje realizado. Hizo extensivo el estudio al rol que ocupa la mujer en los medios. Llamó la atención sobre una nota publicada el 8 de marzo en la sección “Policiales” en la que se alude a la cantidad de puñaladas que realizó un agresor sobre una mujer, sin relacionarlo con la fecha. “La alusión al día sirve para activar la conciencia y ese artículo periodístico perdió esa oportunidad”, expresó. Hizo mención especial a cómo se puede informar desde la perspectiva de género.

Fuego, siempre el fuego

Carabajal, integrante de la  red PAR (Periodistas de Argentina en Red – Por un periodismo no sexista), centró el análisis en el caso de Wanda Taddei. La joven estaba en pareja con el baterista de la banda Callejeros, Eduardo Vázquez y murió quemada. Responsabilizado por lo ocurrido el agresor está preso y siempre declaró que se trató de un accidente. Más allá de su popularidad por pertenecer a Callejeros, tristemente recordados por el incendio de Cromagnón, Carabajal expuso el gran incremento de delitos similares al expuesto: con víctimas fatales y sobrevivientes. Los datos cuantitativos exhibidos son de la Casa del Encuentro, Organización de la Sociedad Civil, pues no existen datos oficiales. “Esta carencia es muy reveladora”, expresó la periodista.

El equipo junto a Sabbatella

Por último, la Defensora del Público (figura iniciada a partir de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, 26.522), propuso un interesante ejercicio a la audiencia: compartió las definiciones que el diccionario brinda para las palabras “hombre” y “mujer”. A partir de una interesante lectura concluyó que los significados que otorga el lugar del saber, están plagados de sexismo. Trasladó la representación simbólica que realiza el diccionario a las representaciones sociales, y a los medios de comunicación como  dispositivos constructores de sentido.

Sobre el final respondieron algunas preguntas, abriendo el acceso al “Decálogo para el tratamiento periodístico de la violencia contra la mujer”. Drucaroff fue muy ilustrativa al compartir un ejemplo de acoso sexual padecido durante su adolescencia y explicó que en esa oportunidad no se lo representaba a sí misma como tal. Enumeró realidades que llevan a las adolescentes a ser consideradas como objeto: “presencia” laboral que llega hasta el uso de uniformes o mini shorts humillantes. El argumento esgrimido por la académica da validez y necesaria actualidad a la existencia del Conacai.

Concluyó la jornada con un íntimo y cálido recital de Sandra Mihanovich, demostrando en la potencia de su voz el alcance que tiene la participación activa de la mujer en la sociedad como Sujeto de Derecho. Presentó un tema de su nuevo disco “Vuelvo a estar con vos”, que refleja el sentido de la ley de SCA, 26.522: “Música que eleva las almas”.

MVA